Maria Flores y Jose d'Almeida son una pareja de fotógrafos portugueses que trabajan a cuatro manos. Ambos empezaron como pintores y sus primeras fotografías las realizaron como bocetos de una posterior obra pictórica. Poco a poco, las fotografías fueron perdiendo su función preparatoria y ganaron su espacio como obras independientes.
Sus fotografías implican una cuidadosa puesta en escena y suelen presentar escenarios con una fuerte carga onírica y un marcado simbolismo. Su estética es muy dependiente del Barroco y sus composiciones suelen ser recargadas y complejas. La obra final requiere de un intenso trabajo de post-producción y retoque digital.
Habitualmente, son ellos mismos los que suelen posar en sus fotografías.
Este Jogo de anjos (Juego de ángeles) nos remite a la lucha entre el bien y el mal, a la dicotomía existente dentro de cada uno de nosotros.
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