martes, 30 de agosto de 2011

DE QUE NADA SE SABE

La luna ignora que es tranquila y clara
y ni siquiera sabe que es la luna;
la arena, que es la arena. No habrá una
cosa que sepa que su forma es rara.

Las piezas de marfil son tan ajenas
al abstracto ajedrez como la mano
que las rige. Quizá el destino humano
de breves dichas y de largas penas

es instrumento de otro. Lo ignoramos;
darle nombre de Dios no nos ayuda.
Vanos son también el temor, la duda

y la trunca plegaria que iniciamos.
¿Qué arco habrá arrojado esta saeta
que soy? ¿Qué cumbre puede ser la meta?


FICHA TÉCNICA
JORGE LUIS BORGES
LA ROSA PROFUNDA
EMECÉ. BUENOS AIRES, 1975



lunes, 29 de agosto de 2011

SHATRANJ KE KHILADI

Shatranj ke khiladi (Los jugadores de Ajedrez, 1924) es un relato de Munshi Premchand uno de los principales representantes de una literatura tan poco conocida por estos pagos como es la hindi. Hasta hace bien poco, una versión en castellano de este relato era accesible en la página web "Indica, ediciones electrónicas". Lamentablemente, en los últimos tiempos esta página parece estar en un prolongado estado de mantenimiento técnico.

En las notas bio-bibliográficas que pueden encontrarse en la red se insiste en el hecho de que Premchand llevó el realismo a la literatura en hindi, y en urdu ya que también escribía en este idioma, y que su preocupación fue la de mostrar los problemas de la gente común con un ánimo reformador de la sociedad.

Los jugadores de ajedrez cuenta el interminable enfrentamiento al ajedrez entre Mirzá Sajjad Alí y Mir Roshan Alí, dos nobles ociosos que viven con desahogo de las rentas que les proporcionan sus feudos, indiferentes a cualquier cosa que no sea su pasión por el ajedrez. Insensibles a las necesidades de sus familias, insensibles a las necesidades de su país, viven enteramente sumidos en su obsesión mientras su entorno se desmorona y la “Compañía Británica de las Indias Orientales” se hace con el control político y económico en nombre de su Graciosa Majestad.

El ajedrez es, pues, el elemento escogido por Premchand como símbolo para criticar a una clase social privilegiada pero indiferente ante la sociedad a la que pertenece y cuyo egoísmo a la hora de satisfacer sus necesidades personales les llevó al abandono de sus responsabilidades y a la connivencia con la potencia extranjera que debía colonizarles.

En 1977, Satyajit Ray llevó la obra de Premchand a la gran pantalla. La película de Ray, a mi modesto entender, mejora considerablemente la obra en la que se inspira. No solo porque al ampliar el número de personajes que intervienen en la trama se ofrece un panorama más amplio de la sociedad de la época, incluido el punto de vista de los colonizadores, sino porque la forma de tratar la obsesión por el ajedrez de los protagonistas ofrece una dimensión simbólica de mayor profundidad que el brevísimo relato de Premchand. 


  
También aquí el ajedrez es utilizado como símbolo del inmovilismo, del solipsismo, del egoísmo de una clase social desinteresada de todo y de todos, salvo de sus privilegios. Pero introduce un arma que acentúa el carácter crítico de la obra: el humor. La línea argumental del guión sigue con fidelidad la obra en la que está inspirado. También aquí los dos amigos están empeñados en un enfrentamiento sin fin al ajedrez, pero son dos personajes ridículos, ignorantes hasta del hecho de que el ajedrez se había inventado en India, extraordinariamente pagados de sí mismos y de sus ancestros ilustres pero cobardes a la hora de defender a su país, arrogantes pero cornudos porque sus esposas terminan por desesperarse ante su falta de atenciones. 


Extramuros de sus palacios, algo se está moviendo. El mundo está cambiando rápidamente. Incluso, como les informa un visitante, ahora hay otra forma de jugar al ajedrez traída por los británicos, más rápida, en la que los peones pueden mover dos casillas y coronar, en la que hay una nueva pieza de inmenso poder: la dama. "Así que encuentran nuestro juego muy lento" -comenta Mirzá- "como nuestro transporte" -remata Mir entre risotadas. 



La peripecia vital de ambos correrá en paralelo con la de su país, su anhelo de jugar sin interrupciones les hará ir cediendo terreno hasta quedar arrinconados. Al comenzar la película, las partidas se celebran en la casa de Mirzá. Pero allí son interrumpidos constantemente, sobre todo por la mujer de Mirzá que se queja amargamente de la soledad y el abandono a que la tiene sometida su marido. En un desesperado intento de llamar su atención, la esposa roba los trebejos. Pero, como cualquier adicto, la pareja tiene sobrados recursos procurarse su vicio.




Primero se dirigen a la casa del viejo abogado de ambos para pedirle prestado su juego, pero encuentran al anciano agonizando y su plan se frustra. Por supuesto, ninguno de los dos amigos muestra la más mínima empatía por el moribundo o por sus familiares. Sólo tienen una obsesión, encontrar un modo de seguir con sus partidas. Están obsesionados con el juego que en la calle dibujan tableros con la contera de sus bastones.




Mientras esto ocurre, los británicos están maniobrando para que su control sobre el país se transforme definitivamente en una anexión. Descubrimos que el rey es un personaje similar a nuestros protagonistas, en su caso es la poesía y la música la que llenan su existencia, más que gobernar a sus súbditos lo que hace es entretenerlos con las canciones que compone en las tediosas sesiones de gobierno.


Mirzá y Mir, tan aburridos como su rey, deambulan por la ciudad pensando qué hacer hasta que tienen una gran idea: no necesitan los trebejos desaparecidos para jugar. Vuelven a la casa e improvisan unos con frutos e utensilios domésticos.




Pero el despecho de la mujer de Mirzá no ha remitido y el juego se torna imposible. Así que deciden reanudarlo en la casa de Mir. Pero allí es peor aún, la esposa de Mir tiene un amante y a base de mentiras, afirma que los soldados del rey están buscando hombres para empuñar las armas y defender el país, consigue intimidar lo suficiente a los amigos para que abandonen la casa.


Por fin deciden alejarse de la ciudad para jugar tranquilamente en el campo, sin interrupciones. Pero ambos amigos están nerviosos, empieza una disputa por una pieza tocada y no movida. Hay insultos y salen a relucir cuernos y antepasados de dudoso linaje. El enfrentamiento va a más y uno de los amigos termina hiriendo al otro de un disparo. Aún así el único lamento que se les oye es que ahora no tienen rival contra el que jugar. En estas están cuando ven entrar a los ingleses, sin disparar un solo tiro, en la ciudad.


Lo que se presenta como tragedia en el relato de Premchand, donde los contendientes terminan matándose entre sí, se repite como farsa en la película de Ray, donde el enfrentamiento entre ambos es tan ridículo como el resto de su comportamiento. Avergonzados, conscientes de su humillación, reanudan su partida para esperar que la noche esconda sus miserias. Una última metáfora entra en juego. Esta última partida se disputará bajo las normas del ajedrez europeo. La película termina en un plano fijo de la dama en la mano de Mirzá mientras este dice: "adiós, ministro. Bienvenida, reina Victoria". La derrota se ha consumado. 




FICHA TÉCNICA
SHATRANJ KE KHILARI (LOS JUGADORES DE AJEDREZ)
SATYAJIT RAY
DEVKI CHITRA PRODUCTIONS, 1977

sábado, 27 de agosto de 2011

DE VARIA INVENCIÓN LXIV

VAINICA DOBLE


Abuelo da a papá
jaque mate al ajedrez,
me aburro

FICHA TÉCNICA
VAINICA DOBLE
"CHAPARRÓN DE ABRIL" DENTRO DE "EL TIGRE DEL GUADARRAMA"
GUIMBARDA, 1981

jueves, 25 de agosto de 2011

LORD DUNSANY

Hoy presentamos, tardíamente pero por la puerta grande, a Edward John Moreton Drax Plunkett, XVIII barón de Dunsany. Dramaturgo, poeta, escritor de género fantástico al tiempo que cazador, campeón de Irlanda de tiro y viajero, Lord Dunsany tuvo una estrecha relación con el ajedrez a lo largo de su vida.

Como aperitivo a lo que vendrá, un poema dedicado a Rufus Henry Streatfeild Stevenson, organizador de torneos y dirigente ajedrecístico, amen de marido de la campeona del mundo de ajedrez Vera Menchik, publicado en la British Chess Magazine en 1943. En España, que yo sepa, se publicó por primera vez por Antonio Gude en el llamado número lúdico, el 83, de la "Revista Internacional de Ajedrez" en agosto de 1994. 


A la memoria de R.H.S Stevenson


Dicen que el arte no sirve para nada;
que las plácidas veladas jugando al ajedrez,
la emoción, el triunfo y la tregua
a las preocupaciones carecen de valor.

Y, no obstante, si todos aquellos cuyo fin
es dañar al hombre jugaran al ajedrez
aún tendríamos en pie ciudades
que ahora son polvo entre los muertos.

miércoles, 24 de agosto de 2011

WILL BARNET

Will Barnet, quien acaba de cumplir 100 años y todavía está en activo, es un artista estadounidense formado en la Escuela del Museo de Bellas Artes de Boston y en la Arts Students League de Nueva York. 

En sus comienzos se vio influido por el movimiento de moda, el expresionismo abstracto, pero ya en los propios años 40 fue evolucionando hacia unas composiciones más geométricas. Fue uno de los integrantes del Indian Space Painting, un grupo informal de creadores que buscaron su  inspiración en el arte tradicional de las tribus indígenas norteamericanas. La pretensión de Barnet era crear un "auténtico arte americano" alejado de las influencias europeas. Durante años, su trabajo fue una reflexión sobre el arte de los diversos pueblos indígenas y su aplicación a escenas de la vida cotidiana.  

A partir de los años 60 su obra se hizo figurativa y se centró en uno de sus temas favoritos de siempre: su propia familia, animales domésticos incluidos. Una de sus series litográficas más famosas es la llamada Silent Seasons en la que muestra repetidamente a una joven, probablemente su hija Ona, acodada en una mesa junto a una ventana. Siempre en la misma postura, siempre en el mismo sitio. Pero realizando cosas diferentes: escuchando música, haciendo pompas de jabón, jugando con su periquito y, en la titulada Seventh Season, jugando al ajedrez



FICHA TÉCNICA
WILL BARNETT
SEVENTH SEASON (1975)
SERIGRAFÍA. 91,44x69,85 cm.

martes, 23 de agosto de 2011

QUIERO SER CALIFA EN LUGAR DEL CALIFA

La semana pasada falleció Jean Tabary a los 81 años. Tabary fue uno de los grandes dibujantes de lo que se dio en llamar la escuela franco-belga de cómics para jóvenes. Aunque su producción es extensa, en España será recordado por la creación de un malhumorado personaje de nariz puntiaguda, escasa estatura, tocado verde y larga perilla terminada en punta, tacaño hasta el paroxismo, traicionero, cruel, amante de los juegos de palabras y delirantemente cómico: el gran visir Iznogud (He's no good) obsesionado con llegar "a ser califa en lugar del califa".

En el Bagdad de las mil y una noches, el bondadoso califa Harún-el-Pussah pasa la vida durmiendo y su visir tramando mil y una conspiraciones para derrocarlo con la compañía de su fiel esbirro Dilá-Lará. Aventura tras aventura, todos los intentos de Iznogud fracasan estrepitosamente.

El personaje nació en 1962 fruto de la colaboración de Tabary con el guionista René Goscinny y tuvo un éxito inmediato y duradero convirtiéndose en una de las series favoritas de los lectores (entre los que se cuenta el autor de esta nota). A partir de 1977, después de la muerte de Goscinny, Tabary continuó la serie en solitario ocupándose tanto del dibujo como del guión.

En 1966, ediciones Dargaud publicaba el primer álbum recopilatorio de las aventuras de Iznogud. En la última aventura, titulada "La isla de los gigantes", Iznogud intenta abandonar al bueno de Harún-el-Pussah en una isla habitada por dos terribles gigantes con la intención de que estos lo devoraran y llegar a ser por fin "califa en lugar del califa". Como siempre, algo sale mal en los planes del visir y termina, junto a su fiel Dilá-Lará, convertido en un trebejo del juego en el que los gigantes disputan sus partidas de ajedrez. Lamentablemente, lo gigantes han colocado mal al rey y a la dama sobre el tablero.

  
Gigante:
Tu turno, Pierrot. Llevas las blancas.


Dilá-Lará (en ropa de caballo):
¿Se acuerda de lo que le había dicho, patrón?


Iznogud (en traje de alfil de rey):
¡Una palabra más y te estrangulo!


El rey blanco:
¡Silencio, alfil! Hay que concentrarse en el ajedrez.





miércoles, 17 de agosto de 2011

SUZANNE ROGER


Suzanne Roger fue una artista francesa activa entre los años 20 y 80 del siglo XX. Formó parte de la segunda generación de artistas promovidas por el marchante alemán Daniel-Henry Kahnweiler, la primera fue la del cubismo con Picasso y Gris.

El estilo de Roger se caracteriza por la presencia de figuras abstraidas, frecuentemente asexuadas, con un cierto feísmo y realizadas en grisalla lo que produce unos lienzos monocromos en los que es la luz la que articula el volumen. Como muchos de sus contemporáneos, se vio influida por el arte africano primitivo, lo que se nota especialmente en el tratamiento esquemático de los rostros.





FICHA TÉCNICA
SUZANNE ROGERS
JUGADORES DE AJEDREZ, 1923
ÓLEO SOBRE LIENZO, 38x61 cm.
MUSEO NACIONAL DE ARTE MODERNO, PARÍS

martes, 16 de agosto de 2011

MORTADELO Y FILEMÓN

¿Puede considerarse el ajedrez como un deporte de alto riesgo? Sí, en la desaforada imaginación de Francisco Ibáñez el creador de Mortadelo y Filemón.


Gracias a Daniel, que me prestó el libro.

FICHA TÉCNICA
FRANCISCO IBÁÑEZ
SUPERHUMOR 31
EDICIONES B. BARCELONA, 2001

ENRICO RUGGERI

En la vida, como en el ajedrez, un rey que se queda solo, sin la compañía de sus piezas, es decir de sus amigos, y de una mujer que lo ame es una cosa bastante triste.




De una entrevista concedida por Enrico Ruggeri a Anania Casale, publicada en el semanario "Visto" en julio de 2007.



lunes, 15 de agosto de 2011

DEFENSA FRANCESA


"Defensa francesa" es el título del quinto álbum del cantautor italiano Enrico Ruggeri. En la cubierta, el propio Ruggeri aparece jugando al ajedrez contra un ragazzino. El muchacho se está defendiendo, lógicamente, con la variante clásica de la defensa francesa.

La dedicatoria del disco dice: "este álbum está dedicado a Adolf Anderssen, Paul Morphy, Alexander Alekhine, Bobby Fischer y a todos aquellos que han revelado la gran humanidad, sostenida por el pensamiento científico, del más noble de los juegos". 

No hará falta añadir que Ruggeri es muy aficionado al ajedrez y que juega siempre que puede además de estudiar libros de teoría en sus ratos libres.

Sobre el título de esta obra, Ruggeri explicó que más que una preferencia por la defensa francesa pretendía ser un homenaje a la defensa que de su cultura, de su cine, de su canción, de su lengua, hacen los franceses cosa que a él le parece digna de imitación. 

domingo, 14 de agosto de 2011

DE VARIA INVENCIÓN LXIII

JESÚS FERRERO 
...y Lewis Carroll, el pobre Carroll o el pobre Dogson, diácono con piel de cordero, matemático pérfido y ajedrecista diabólico, fotógrafo pornográfico y perseguido...

FICHA TÉCNICA
JESÚS FERRERO
EL BESO DE LA SIRENA NEGRA
SIRUELA. MADRID, 2009

lunes, 8 de agosto de 2011

PAWEL KUCZYNSKI


Hoy mostramos una ilustración del polaco Pawel Kuczynski titulada "Ajedrez". Nacido en 1976 y graduado en la Escuela de Bellas Artes de Poznan, desde 2004 Kuczyinski colabora asiduamente con diversas publicaciones de la Europa Oriental y ha recibido numerosos premios internacionales por su obra.

El territorio donde se mueve Kuczinsky es el de la sátira. Sus dibujos plantean una dura crítica a las desigualdades sociales, al deterioro medioambiental, a los abusos de los poderosos (y al discurso que lo disimula) y, en definitiva, a los aspectos más oscuros de la vida cotidiana contemporánea.

Técnicamente presenta un dibujo realizado con unos colores muy saturados mediante los cuales compone imágenes sorprendentes cercanas al surrealismo. Aunque a este respecto, el artista considere que es "un ilustrador realista en un tiempo surrealista".

El pescador de la ilustración, que navega sobre un tablero, ha lanzado el aparejo y detiene su reloj: es el turno de la naturaleza.

domingo, 7 de agosto de 2011

AJEDREZ EN EL SET I GREGORY PECK

El largo tiempo de preparación entre escena y escena hace que los rodajes cinematográficos estén llenos de tiempos muertos que actores y técnicos intentan llenar de la mejor manera posible. El ajedrez ha sido uno de los medios tradicionales para llenar esos huecos y es habitual que entre las gentes del cine haya muchos aficionados a jugarlo.

Así que, vamos a iniciar una galería de actores, directores y otras gentes de cine jugando al ajedrez entre escenas que bien podríamos titular "Ajedrez en el set de rodaje".

Empezamos por Gregory Peck protagonista de algunas de las películas más importantes del siglo XX como "Recuerda" de Alfred Hitchcock, "Las nieves del Kilimanjaro" de Henry King, "Moby Dick" de John Huston , "Horizontes de grandeza" de William Wyler, "El cabo del terror" de J. Lee Thompson" o "Matar a un ruiseñor" de Robert Mulligan" 

En la imagen de abajo le vemos en 1961 enfrentándose con Anthony Quinn durante el rodaje de la película de J. Lee Thompson  "Los cañones de Navarone" bajo la atenta mirada de sir Anthony Quayle.  



Al año siguiente, enseñó a jugar al ajedrez a la actriz Polly Bergen mientras rodaban "El cabo del Terror", también de J. Lee Thompson


Y el mismo año, continuó con su labor docente enseñando el juego a Phillip Alford, en presencia de Mary Badham, durante el rodaje de "Matar a un ruiseñor" de Robert Mulligan.


jueves, 4 de agosto de 2011

COMER, BEBER, JUGAR

Si tiene que dar un banquete para sus amigos ajedrecistas no encontrará un mejor complemento que este juego de salero y pimentero de cristal diseñado por la compañía estadounidense Kikkerland. "Jaque mate" se llama.


Y como es de suponer que el vino correrá de forma generosa y abundante, para prevenir la oxidación, en caso de que sobre algo, puede utilizar estos tapones de madera y corcho de la misma empresa que, según su publicidad, proporcionan la mejor defensa para sus botellas.


Y al final de la comida puede utilizar todos los accesorios para analizar las últimas novedades teóricas o mostrar sus partidas más brillantes. Tenga la precaución, eso sí, de utilizar un mantel escaqueado.

Visto en el blog de decoración Decoratrix.


lunes, 1 de agosto de 2011

JAQUE MATE A LA COMPETENCIA


En estos días, Madrid está lleno de grandes carteles publicitarios de una de las muchas compañías de telefonía que han proliferado tanto en los últimos tiempos como las medusas en el Mediterráneo.

"Jaque mate", dice el anuncio, mientras un rey blanco aparece tumbado sobre el tablero simbolizando a la competencia derrotada por las condiciones sin igual del anunciante. Pero, no contentos con la aniquilación del contrario, en una segunda entrega afirman: "una blackberry sin Yoigo es como una partida de ajedrez sin rey". Aquí se han pasado, una partida de ajedrez es imposible sin la presencia de uno de los dos reyes y supongo que no pretenderán decir que las blackberry solo funcionan con su compañía.