
Fue realizada para ilustrar un libro de Curnonsky (seudónimo de Maurice Edmond Sailland) titulado Huit peintres, deux sculpteurs et un musicien très modernes (Ocho pintores, dos escultores y un músico muy modernos).
Obviamente, Duchamp era uno de los pintores glosados en el libro y de Zayas eligió para caracterizarlo dos de sus rasgos más peculiares: la pipa y el ajedrez.
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