Theresa Bernstein fue una pintora norteamericana de origen polaco que posee un insólito récord bastante difícil de igualar. Debido a su gran longevidad, murió cuando estaba a punto de cumplir 112 años, Bernstein logró exponer en todas y cada una de las décadas del siglo XX; en vida, claro está.
Aunque tuvo un relativo éxito al principio de su carrera, los caprichos del mercado del arte la relegaron a un segundo plano y a una perdurable obliteración de la que aún no ha salido. Aunque ella misma no hacía mucho por darse a conocer. Su pintura figurativa, centrada en describir la vida de la comunidad judía norteamericana y la de su propia familia y amigos y a documentar la historia de la ciudad de Nueva York, no es precisamente del estilo del arte que encandila a los críticos. Y luego del aluvión de artistas europeos que huyendo del nazismo se instalaron en los U.S.A. a mediados del siglo XX, su pintura fue considerada directamente demodé.
Del carácter de la pintora da una precisa prueba la siguiente anécdota. Estando en su lecho de muerte el marido de Theresa, el también pintor William Meyerowitz, ya nonagenario, y refiriéndose a su cercana muerte dijo a su esposa: "tienes que seguir adelante". Theresa le tomó la palabra al pie de la letra, le sobrevivió 23 años y emprendió, superados los noventa años, una nueva carrera como novelista.
El cuadro que presentamos hoy, titulado "Los jugadores de ajedrez", se pintó en el estudio que los artistas tenían en Gloucester, Massachusetts. De izquierda a derecha aparecen: la propia pintora tocando el piano, su marido, William Meyerowitz, el también pintor Stuart Davis y el campeón de ajedrez del estado de Massachusetts, Weaver Adams.
FICHA TÉCNICA
THERESA BERSTEIN
THE CHESS PLAYERS (1926)
ÓLEO SOBRE LIENZO. 101,6 x 127 cm
COLECCIÓN JIM FISH
Hola Mariano.Muy buen articulo.
ResponderEliminarSaludos
Gracias, Alex.
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Mariano