Hace algún tiempo hablamos de la prohibición de jugar al ajedrez que se dio en distintas culturas.
Dentro del Islam ha habido desde sus orígenes una corriente permisiva hacia el juego, siempre que no mediaran apuestas, y otra rigorista que lo prohíbe absolutamente.
El Gran Ayatolá Sayyid Ali al-Housayni al-Sistani, una de las máximas autoridades religiosas del mundo musulmán chií, es partidario de la prohibición total, tal y como se puede leer en su página web.
En Irán, después del triunfo de la Revolución Islámica de 1979 también fue prohibido. En "Persépolis", la novela gráfica de Marjane Satrapi que narra las peripecias de la propia autora en los años posteriores al triunfo de la revolución, podemos ver como los Guardianes de la Revolución perseguían a aquellos que, simplemente, poseían un juego de ajedrez.
FICHA TÉCNICA
PERSÉPOLIS
MARJANE SATRAPI
NORMA EDITORIAL. BARCELONA, 2007
Es una pena que haya gente así. Pero claro, un juego que enseña a la gente a pensar... es peligroso, principalmente, para quien apuesta por el fanatismo acrítico.
ResponderEliminarEn la edad media, algún que otro rey cristiano también quería prohibirlo pero, recordemos, era en la EDAD MEDIA.